sábado, 17 de enero de 2009

CRÓNICA DE UNA TARDE DE "FÁBULA"




Eran las ocho de la tarde, el Ateneo Riojano extendía su luz de letras por toda las calle Muro de cervantes y las rúas colindantes. Elena Mahave y entramos en el portal, ya dos mujeres subían al recital. Al llegar, a la izquierda, sentados en las sillas de la cafetería, estaban Carlos Villar, Andrés Pascual y Adrián Pérez Castillo. Ascen estaba en el camino, como siempre, mirando que todo estuviera listo. Los tres se levantaron al verme y me saludaron. Luego llegó Piedad Valverde, tan ajetreada como siempre, y los demás.

Ayer decidí ponerme la falda larga, las manoletinas (ya que los nervios me jugaron malas pasadas en Valladolid con los tacones) y una camiseta negra con una sobrecamisa o algo raro de transparencias. Como siempre, la melena suelta y rizada, dejada a su libre eleción.

Adrián me explicó que ya en abril saldrá la antología, qué decir de las ganas que tengo de verla. Me dijo que, para abrir boca, me enviará los poemas que ha escogido, tanto los míos como los de los demás, y que uno de los mío es de aquellos que escribí a Leanan, una de mis Musas.

Pasamos al salón de actos donde tendría lugar el recital. Allí estaban Antonio García Gómez, Diego Marín (con una palabra de ánimo para cada uno), Juan Kim (a quien no veíamos desde hacía tiempo, pero que sigue como siempre), Alberto y Nekane (que vinieron juntos y se ocuparon de mi cámara de fotos mientras yo recitaba, a ellos debo las fotos que tengo), Hernán Yaniquini (nuestro maquetador que ahora mismo no tiene internet) y perdón si me dejo a alguien.

Nos sentamos todos juntos, los ocho que íbamos a recitar, en primera fila.
Primero se leyó un relato, quizás muy extenso para un recital, pero igualmente atractivo, luego me tocó el turno a mí.
María Luisa, que era quien hacía las presentaciones, habló de mi tetranacionalidad (rusa, logroñesa, peroblasqueña e irlandesa) y de otras cosas. Y dijo una frase que ahora mismo no recuerdo, me describió en cuatro palabras, creo que era algo así como "la inquietud hecha mujer". Me pareció hermoso. Recordé el recital del año anterior en Santos Ochoa, mis nervios, a Javier a mi lado, a mi madre (que llegó tarde) y a María Luisa diciendo, antes de que yo recitara "La Bella y la Bestia del siglo XXI" que de mí le sorprendió mi madurez.
En aquel momento "Parque de atracciones" aún estaba en mis deseos de verlo pronto, sin ser una realidad tangible.

Subí al atril, saludé y di gracias. "Me llamo Nerea Ferrez y voy a leer cuatro poemas". Aquel fue mi comienzo. Expliqué el por qué de mi tetranacionalidad, mi amor por Irlanda y que dedicaría cada uno de los poemas que iba a recitar a alguien ya que llevaba ya 10 años escribiendo. Por lo menos, que yo recuerde.

"Tú y yo" se lo dediqué a mi madre, que no pudo ir. A sus dudas, sus críticas y a que seguramente pensaría que iba a leer "Oda al mejor amigo del hombre", que podéis leer en este mismo blog).
Después vino "La Bella y la Bestia del siglo XXI", dedicado a Eva Alejandre Villate. Conté que, aunque aún no ha sido publicada, ha sido la ganadora del 1er premio de poesía en el festival de Artefacto de este año. Me hubiese gustado que estuviera allí, tanto Eva, como Iris o Javier, habían algunos huecos que nadie consiguió llenar. Me sentí un poco sola. Poderosa en mis palabras, firme, pero sola.
"Gomás Milán" se lo dediqué "a todos los lugares que me han visto nacer y a todas las personas que se han quedado en el camino".
Y, finalmente, leí "Enredadera", dedicado a Clara Santafé, una de mis hermanas rusas, que no pudo estar pero de quien dije, espero podamos escuchar pronto otra vez.
Y terminé con un "Gracias" y aplausos. Sin sentir vértigo ni un instante, ni nervios, nada. Me sentía como si aquel atril fuese el lugar al que siempre había pertenecido y el micrófono fuese la ventana por la que miraba el mundo cada mañana.

Después de mí, Elena Mahave y su Iberia, Jesús con su café y sus viajes, Raquel, que fue la única que se sentó en la mesa, Andrés Pascual, a quien se me olvidó hacerle foto porque me quedé asombrada con sus palabras, Fernando, con quien luego estuvimos en un bar,...

Y así se pasaron dos horas. Después, el público que te pregunta, una mujer cuya madre era de peroblasco, otra que había entrado a mi blog (por cierto, gracias a todos por las más de 1000 visitas), la tía de Andrés que quería que le firmásemos pero que dijo q eu ya nos pasaría la revista, ya que cerraban el Ateneo y teníamos que irnos a cenar proque eran más de las 10.

En la cena, como siempre, no callé, creo que ya se conocen mi vida o, al menos, parte de ella.
Hablamos de Peroblasco y sus maravillosos habitantes, que hoy celebrarán, aunque yo no estaré allí para poder verlo, la hoguera de San Sebastián.

Después de cenar nos fuimos Ignacio (que dijo que no sabía por qué María Luisa lo llamaba Ignacio en lugar de Nacho, como nos explicó que le llama todo el mundo), Fernando, Elena, Jesús, Raquel y yo a un bar que, a pear de no tener en su grafía ninguna "i", las poseía todas.
Tomamos un cóctel, el mío con nombre de baila latino ("Bambolero", y es que tengo predisposición al ron), y comimos maíces, cacahuetes y galletitas saladas. Hubio quien fumó tabaco de liar con aroma a cerezas.
Estuvimos hablando de literatura, de Manuel Hidalgo, Espido Freire, Boris Izaguirre, Pérez-Reverte, Juan Manuel de Prada,... de premios y premiados, de versos y palabras.
Fernando me felicitó por mi reseña del libro de Manuel Hidalgo.
Cuando salimos del bar, cada uno en dirección a su casa, nos regaló unas palabras a cada uno, a mí me dio una poesía afrimando que eran los únicos versos que tenía.

Jesús, Elena y yo nos fuimos en dirección a Gonzalo de Berceo, los demás se marcharon hacia la calle Chile cubiertos por las sombras.
El último tramo hacia mi casa estaba comenzando a penetrar la niebla, el frío no me dañaba, pensaba en todo lo sucedido, tratando de recordar todos los nombres y de olvidar que hoy debía levantarme temprano para estudira o, quizás mejor dicho, repasar, ya que el lunes 19 de este mes empezamos los exámenes.

Aquí mi crónica d ela noche de ayer.
Trataré de incluir algunas de las fotos que hice por ilustrar mejor mis palabras.
Gracias a todos los que estuvisteis alli y a los que habéis leído este texto al completo.
Nos vemos en la próxima.
Mientras tanto, nos seguiremos leyendo.


NOTA: Para ver las fotografías seguid el siguiente enlace http://enredadaentrelaspalabras.blogspot.com/2009/01/crnica-de-una-tarde-de-fbula.html

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Todavía dejan entrar a Marín el arribista en los actos de Fábula? Más coherencia es lo que hace falta.

Nerea Ferrez dijo...

Mega Butts, escribo esto porque, como ya dije en anteriores comentarios, no permitiré insultos en mi blog. Los problemas que puedas tener con Diego Marín soluciónalos con él, pero no despotriques en un blog.
Encara el problema y no te escudes tras un apodo porque eso no dice nada bueno de ti.