viernes, 12 de septiembre de 2014

Azar

Escuchando: "Let Her Go" de Passenger

Quédate y deja la luz prendida
de un instante
que los monstruos se agolpan a mi puerta
con las palabras que arrastran la carne
y envenenan.

No te marches
y te lleves la luz que me queda
el frío atado a los huesos
y se me rompe el cristal que los acoge.

Quédate y deja la luz prendida
de un recuerdo
alegre
que nos caliente cuando seamos demasiado
pobres para pagar las facturas.

No te marches
que el tiempo de las lágrimas
me ha ajado las curvas
de mi sonrisa
y sólo tú puedes arar esta tierra
y lograr que sea fértil.

Quédate y deja la luz prendida
de un nosotros
que es invierno fuera
y hace demasiado calor en mis entrañas
y me estoy quebrando.

No te marches
que estoy hecha de la materia
con que se hacen los sueños,
débil y fuerte a un tiempo.

Quédate y deja la luz prendida.
no te marches
que en un instante
soy, eres, somos, seremos.

Memories

Escuchando: "Stay" de Hurts

El sonido de una tristeza,
no,
del eco de una tristeza,
de un rumor del eco de una tristeza,
del recuerdo del rumor del eco de una tristeza
y, sin embargo,
aquí está
esa lágrima que despunta,
que quiere salir arrastrando el peso de todas las sombras.
Y yo
sola
sola en el fondo
de lo que no tiene fondo
allí donde hay mucho más por caer
y muchos peldaños que escalar
hasta que la luz asome su rostro tímido.
El optimismo brega por no encogerse
pero la sombra, el miedo, el peso, los muertos, las palabras
son muchos
son bastantes
son demasiados
y a veces caigo
aunque tú trates de elevarme.
Pienso
"vete, vete, aléjate de mi, aléjate, Leanan aún duerme"
y tú no me escuchas,
me besas y te sumes en la sombra
la sombra nos devora
sólo espero
que encontremos la luz
al otro lado.