Varada en la tubería
oscurecida en su todo
así
llena de aquello que no se nombra
aletargada en la sombra alargada de un sueño
que agita los miembros
y no es sino hielo y escarcha
Atascada
sedienta de todo
ardiente de nada
así
se la encontraron un día
secas las lágrimas
de tanto llorar
huecos los ojos
la sonrisa mueca
esperpento de vida
una palabra era bastante
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