Sé que a veces soy difícil,
hasta yo misma no me soporto,
pero hay días en los que los monstruos me engullen
con sus fauces de hielo y cristal.
Y traquetea en mi pecho una locomotora cansada
y en mis venas arde la tristeza y el miedo
reduce la esperanza a cenizas.
Sé que a veces soy difícil,
aún más en estos tiempos
de dolor transitado y recuerdos demasiado hermosos
para no vivir en ellos,
pero quiero pensar que aún una sonrisa merece el esfuerzo
aunque haya costado un mar en llanto y ceños fruncidos.
Sé que a veces soy difícil,
la dificultad la encuentro con mi propio obstáculo,
sé que a veces soy difícil,
sólo espero cada día
que el regreso del héroe espante (una vez más) a los monstruos.